Los problemas del sueño son alteraciones muy frecuentemente asociadas a la enfermedad de Parkinson, que afectan hasta el 88% de los casos.1

Entre los problemas más comunes destacan:2

  • Insomnio.
  • Inversión del ciclo del sueño.
  • Nicturia (deseo frecuente de orinar durante la noche).
  • Síndrome de las piernas inquietas (incomodidad parecida a un hormigueo que les insta a mover las piernas).
  • Despertar de madrugada.
  • Apnea del sueño (se deja de respirar durante periodos cortos del sueño, evitando entrar en la etapa restauradora del sueño).
  • Trastorno de comportamiento del sueño REM (movimientos en función de lo que se sueña, que eventualmente puede ser violento).

Un descanso adecuado es importante, ya que aquellos pacientes con poca calidad del sueño o privación del mismo muestran una peor funcionalidad motora.3

Además de la medicación prescrita por el médico, hay varias estrategias que pueden ayudarles a dormir mejor, como:2

  • Mantener un horario de sueño regular.
  • Incrementar la actividad (haciendo ejercicio) y evitar las siestas.
  • Evitar los líquidos después de cenar.